ECONOMÍA

La paradoja del empresariado burgalés: más pesimismo que nunca pero previsión de creación de empleo

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Ya se conocen los resultados del último Índice de Confianza Empresarial de Burgos, correspondiente al segundo semestre de 2022, y que apunta a datos positivos pero esperanzas negativas.

María C.
03/02/2023 - 11:33h.

Como cada año, la Confederación de Asociaciones Empresariales (FAE) ha realizado este análisis. El tesorero, Ignacio San Millán ha explicado que en general han seguido creciendo, puesto que casi la mitad mejoró su situación con respecto al primer semestre del año, y dos de cada tres mejoraron su situación con respecto al periodo anual.

No obstante, de cara al futuro no hay buenas sensaciones. Solo un 15% de empresas espera mejorar este año (el histórico más bajo desde que se realiza el informe), lo que supone un contraste con el periodo pasado, y es que por entonces el 40% se mostraba optimista.

El empleo hoy por hoy se puede decir que se ha mantenido estable, una de cada tres ha aumentado su plantilla y para 2023 se prevé un aumento del 25% de empleo. Es decir, que pese al pesimismo de mejora, se espera aumentar puestos de trabajo, una situación que a priori es paradójica, pero que se debe a la inercia del año y a que no todos los sectores se ven afectados de la misma manera. Por ejemplo, transportes, construcción y oficios (fontaneros, electricistas...) son los más negativos en la creación de trabajo, ha explicado la secretaria de FAE, Emiliana Molero.

Sobra la fuga de talento, tienen previsto un análisis con la Universidad de Burgos

Por su parte, el vicesecretario y director del estudio, Íñigo Llarena ha puntualizado que en esta ocasión han contado con empresas algo más grandes de lo habitual, y que facturan más, representando además a un 25% de la provincia. Contando sobre todo con sector servicios (47%) e industria (40%), pero también construcción (11%) y agricultura (2%).

De entre todas ellas, el absentismo laboral es una tema que parece preocupar a buena parte, y es que un 31% lo considera "problema grave", mientras que el 42% no lo considera problema. En este sentido, un 56% de las empresas encuestadas han contado con alguna baja.

El 60% de los encuestados creen que es consecuencia de una pérdida de control por parte de la administración, por lo que proponen mayor conciencia y mayor seguimiento. Un problema que dirigen especialmente al sistema sanitario y no tanto de mutuas, ya que el 85% de las bajas es por enfermedad común o accidente no laboral, con una media de cuatro a quince días de abstención.

Precisamente para ello están elaborando un estudio sobre incapacidad con el COMBU.

Molero ha comentado que las empresas son especialmente pesimistas porque se mantienen las incertidumbres de la recesión internacional, las tensiones en suministros de materias o los precios de energía y el IPC; así como el incremento de salarios y cotizaciones, que también preocupa a los empresarios.

Por eso creen que la solución podrían ser pagas no consolidadas. Es decir, que sea el propio empresario el que, en función de lo bien o mal que haya ido el año, reparta beneficios entre los trabajadores

Sobre la bajada de autónomos en Burgos (198 menos de diciembre a enero), según datos del Ministerio de Trabajo, San Millán dice que hay un problema de educación y percepción social. La situación es especialmente preocupante y hay que solucionarla con urgencia porque el último dato conocido supone el más bajo de los últimos cinco años, quizá como consecuencia de las cotizaciones en la renta, creen desde FAE.

En total, hay en Burgos 26.728 personas dadas de altas como autónomos, lo que supone una caída del 0'7% en un mes.

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