La provincia de Ávila cuenta con varios Espacios Naturales protegidos entre los que se encuentra la Sierra de Gredos, el Valle de Iruelas, el Pinar de Hoyocasero y las Sierras de la Paramera y Serrota. Con la llegada del verano, cualquiera de estos parajes es una buena opción para disfrutar de unas buenas vacaciones.
Así, la Sierra de Gredos, situada al sur de Ávila, es un impresionante paisaje modelado por la erosión glaciar en las rocas graníticas del Sistema Central. Lagunas, circos, gargantas, depósitos morrénicos, riscos, galayos y cuchillares que culminan en los 2.592 metros del pico Almanzor.
Si el relieve convierte Gredos en una bella y espectacular montaña, desde el punto de vista biológico su hábitat nos ofrece uno de los espacios más interesantes de toda Europa occidental. Debido a su situación geográfica, a los fuertes desniveles y a la distinta orientación de sus laderas, la Sierra de Gredos puede considerarse como un auténtico paraíso para la flora.
Concretamente encontramos más de 1.500 especies en pisos de vegetación, siendo las zonas altas donde crecen la mayoría de los 14 endemismos de Gredos. Los más populares son la boca de dragón de Gredos y la manzanilla de Gredos. En cuanto a la fauna, son más de 230 especies de vertebrados catalogados, entre los que destacan endemismos tales como el barbo comiza, la pardilla, la salamandra del Almanzor y el sapo de Gredos. Habitan también esta sierra el águila imperial, el buitre negro, la cigüeña negra, la cabra montés y el topillo nival abulense.
La reserva natural del Valle de Iruelas, se encuentra al sureste de Ávila, en el límite oriental de la Sierra de Gredos. Sus laderas aparecen cubiertas por un valioso bosque formado, entre otros, por los pinos negral y laricio, de los que se conservan grandes y milenarios ejemplares. En este enclave está instalada la colonia más numerosa de buitres negros de Europa.
Los límites de esta Reserva Natural se extienden desde los 1.950 metros de la cumbre del Cerro de La Escusa hasta los 730 metros de altitud en el embalse del Burguillo. Aquí se puede contemplar un antiguo poblado en el que vivían los resineros que trabajaban en el monte, ahora convertido en alojamientos de turismo rural y la Casa del Parque.
Al sur de la provincia de Ávila y en la depresión que el río Alberche ha abierto entre las sierras de Gredos y la Paramera se localiza el pequeño pinar de Hoyocasero. Su interés ecológico radica en que se dan cita especies vegetales típicas de las regiones eurosiberiana, mediterránea y montana. El árbol predominante es el pino silvestre o albar, del que se conservan unos notables ejemplares. El pinar aparece rodeado por un pujante cinturón de robles rebollos. El alto interés científico del pinar se ve incrementado por la belleza del paisaje en el que está enclavado.
Asimismo, un gran número de especies forestales que encuentran refugio en el bosque: águila calzada, águila culebrera, ratoneros, milanos negro y real, alcotán, lagarto verdinegro, la culebra de escalera, la coronela austriaca, etc.
Finalmente, paralelas y al norte de la Sierra de Gredos se levantan un conjunto de alineaciones montañosas entre las que destacan las sierras de La Paramera y La Serrota. Sus cumbres más elevadas rozan los 2.300 metros y conservan las huellas dejadas por la intensa erosión de los glaciares cuaternarios.
En las laderas de estas sierras abulenses, que todavía conservan unas buenas manchas de roble rebollo, tienen sus fuentes tres importantes ríos: el Adaja -que discurre por el Valle Amblés-, el Alberche y el Corneja. En cuanto a la vegetación destaca un endemismo exclusivo de La Serrota: el Acanthorrhinum rivas-martinezii, y en lo que se refiere a la fauna, las rapaces son de gran interés faunístico, destacando el águila real, así como las liebres y los zorros.