La presencia sospechosa de un vehículo estacionado en las instalaciones del antiguo peaje de Rubena alertó a los agentes. Los presuntos autores fueron interceptados a pie del vehículo, cuando regresaban, con evidencias de pintura fresca en ropas y manos.
La Guardia Civil ha sorprendido, identificado y denunciado a 2 varones de 29 y 32 años de edad como presuntos autores de sendas infracciones por deslucimiento de bienes inmuebles, cuando regresaban de realizar pintadas con botes de spray, sin autorización, en uno de los puentes que cruza la autovía AP-I a la altura de Rubena.
Los hechos ocurrieron días atrás, durante la madrugada cuando, una patrulla del Cuerpo en servicio de prevención de la seguridad ciudadana, observa la presencia de un vehículo estacionado junto a las instalaciones del antiguo peaje de la autopista AP-I, en Rubena.
Si la simple presencia de un vehículo en este lugar ya parecía sospechosa, su ubicación –voluntariamente apartado de la vista-, de noche y en una infraestructura sin actividad alertó a los agentes, que inspeccionaron el entorno sin encontrar a nadie.
Una vigilancia más discreta sobre el 'objetivo' permitió interceptar, sobre las 5:10 horas de esa madrugada, a dos personas cuando accedían al vehículo, por lo que fueron identificados e interrogados sobre el motivo de encontrarse en dicho paraje, entrando ambos en contradicciones al no poder dar una respuesta lógica.
Los sospechosos vestían ropas impregnadas en pintura, al igual que las manos, con claras evidencias de que, estos restos, estaban aún frescos. Alrededor del vehículo hallaron bolsas que antes no se encontraban allí, y en su interior más de 20 botes de spray recién usados y de diversos colores, boquillas y una mascarilla para preservar de inhalaciones tóxicas.
También localizaron un cubo de pintura de 15 litros vacío, una escalera telescópica con barro húmedo en su patas, una vara extensible y un rodillo de pintar.
Los guardias civiles inspeccionaron los alrededores para descubrir, en los pilares y en el muro de contención del puente o paso elevado que cruza la autovía AP-I a la altura de Rubena, sendas pintadas de grandes dimensiones de reciente imprimación con evidencias aún frescas de pintura en el suelo. Además, los colores que adornaban los graffiti coincidían con los de los botes de spray encontrados junto al coche.
Estas acciones ilícitas vienen reguladas en la Ley de Seguridad Ciudadana como deslucimiento de bienes inmuebles, por lo que se han levantado dos actas denuncia; para este tipo de acciones contempladas como infracción, se barajan sanciones de hasta 600 euros, sin perjuicio de las responsabilidades penales a las que deberían enfrentarse en el supuesto de haber incurrido en un delito de daños.
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