Las sedes de algunas ONGs de Burgos, como Cáritas y Burgos Acoge, han amanecido este miércoles con pintadas ofensivas hacia el colectivo inmigrante
El debate que se está generando en la ciudad con motivo de la aprobación de las ayudas a tres de las organizaciones que trabajan con inmigrantes (Burgos Acoge, Atalaya y Accem), se ha trasladado a las calles con resultados poco edificantes y carentes de todo respeto.
Tal y como muestran las imágenes, algunas sedes de diversas ONGs de la capital burgalesa han aparecido vandalizadas con pintadas, grafitis y mensajes de odio hacia el colectivo de las personas inmigrantes.
Se desconocen los autores de estas pintadas, aunque todo parece indicar que han sido realizadas por grupos extremistas.
El apoyo que la sociedad burgalesa ha mostrado hacia estas organizaciones es un testimonio del compromiso de muchas personas con una convivencia justa y respetuosa. La concentración masiva del miércoles pasado en defensa de estas entidades y contra las decisiones políticas que buscan recortar su financiación es un ejemplo de cómo la ciudadanía puede movilizarse para proteger los derechos de los colectivos más vulnerables.
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